Israel bombardeó este viernes varios puntos de la Franja de Gaza, entre ellos un campo de refugiados, al iniciarse el noveno mes de guerra con el movimiento islamista palestino Hamás.
El conflicto, que se inició el 7 de octubre, se cobró decenas de miles de vidas, devastó gran parte de la Franja de Gaza y obligó a desplazarse a la mayoría de los 2,4 millones de habitantes de ese territorio palestino, amenazados por la hambruna.
Los esfuerzos diplomáticos para alcanzar un alto el fuego parecen estancados, una semana después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunciara una hoja de ruta que atribuyó a Israel.
En un nuevo intento de impulsar una tregua, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, volverá a viajar a Oriente Medio la próxima semana, anunció el Departamento de Estado.
Los bombardeos continuaron en todo el territorio palestino, gobernado desde 2007 por Hamás.
El ejército israelí indicó que llevó a cabo un ataque contra combatientes islamistas en una escuela de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Ciudad de Gaza y la oficina de prensa del gobierno de Hamás informó de tres muertos en es elugar.
El jueves, un hospital de la Franja de Gaza anunció la muerte de al menos 37 personas en un bombardeo contra otra escuela de la UNRWA en Nuseirat.
El ejército israelí asumió el ataque, alegando que el recinto albergaba «una base de Hamás», e indicó que en esa operación mató a «17 terroristas».
Desde el inicio de la guerra, «más de 180 instalaciones de la UNRWA (…) han sido atacadas»,informó un portavoz de la agencia, Juliette Touma.
En Deir al Balah, en el centro de la Franja, seis personas murieron y otras seis resultaron heridas por un ataque con misiles contra una vivienda del campo de refugiados Al Maghazi, indicó una fuente médica.