Actualmente, en la región Arequipa existe una brecha del 20% de prefectos distritales. Esta situación se produce debido a que el Ministerio del Interior (Mininter) no destinó el presupuesto suficiente para contratar al número de funcionarios requeridos para que se encarguen de coordinar y supervisar los órganos desconcentrados de diferentes jurisdicciones.
Debido a esta situación, los prefectos y subprefectos distritales que sí están designados deben asumir la carga de procesos que les corresponden a zonas donde no hay prefectos asignados.
De acuerdo a la prefecta de Arequipa, Lucia Valdivia Corrales, en los distritos donde no hay un prefecto distrital, el rol debe asumirlo el subprefecto provincial. No obstante, debido a la gran carga laboral, ahora también se ha dispuesto que apoyen los prefectos provinciales. Esta situación solo se podrá revertir cuando el Mininter envíe fondos extra para poder finalizar las designaciones.
Valdivia informó que en la actualidad, las 8 provincias de la región, es decir Camaná, Castilla, Islay, Condesuyos, Caravelí, Caylloma, La Unión y Arequipa, cuentan con prefectos designados. No obstante, los distritos más alejados de dichas provincias no cuentan con funcionario estatal, lo cual si continúa así, podría causar retrasos en algunos procedimientos que se realizan.
Es importante mencionar que de acuerdo al Mininter, las prefecturas y subprefecturas deben cumplir el rol de mediadores ante conflictos sociales y contribuir con la prevención y resolución de estos conflictos sociales.
Asimismo, deben promover acciones de lucha contra la violencia hacia las mujeres, sobre todo en localidades alejadas donde la presencia del Estado aún es muy limitada. En ese sentido, la falta de prefectos podría ser particularmente perjudicial para las poblaciones alejadas.