Hoy se cumple el 15° aniversario de la declaratoria como Patrimonio Cultural de la Nación al Anaco de Camilaca, vestimenta femenina de origen preshispánico de la provincia de Candarave, en Tacna, su uso está relacionado a rituales de profundo contenido simbólico, como las fiestas de Pascua y Carnaval, ambas asociadas al ciclo del agua.
El anaco o urku consiste en un manto de tipo túnica, que se envuelve de forma horizontal alrededor del cuerpo que se sostiene con grandes alfileres, o tupus, sobre los hombros y con un cinturón largo envuelto varias veces alrededor de la cintura. Aunque el término anaco alude específicamente a la ya referida túnica, hoy en día denomina a todo el conjunto de la vestimenta femenina tradicional de Camilaca.
Todo el traje está compuesto por entre cinco y siete polleras, una camisa o mancaza con mangas de boca ancha, el anaco o urku propiamente dicho, una faja o waga que sujete la túnica, dos alfileres grandes o tupus, un manto pequeño de castilla y, encima de éste, un manto más grande de colores rojo y negro, llamado awayo o lliclla.
Se complementa con la cocheta o inkuña, accesorio que consta de una tela doblada que hace las veces de un bolso donde se cargan hojas de coca, el cual se lleva en el brazo izquierdo.