Desde la noche del Jueves Santo miles de ciudadanos visitaron los principales cerros como Huaynarroque, Espinal, Santa Cruz y otros en la ciudad de Juliaca para hacer penitencia y arrepentirse de sus pecados, además de recoger hierbas medicinales en lo más alto del apu durante la mañana del Viernes Santo.
Como se sabe, cada año miles de devotos, entre niños, jóvenes y adultos subieron a la cima, allí prenden velas que protegen con cartones y mantas a fin de que no se apague el fuego. Cada vela tiene un distinto deseo, algunos piden salud, trabajo y otros.
Según la tradición, en Viernes Santo en la región es en la mañana ayunar, como parte de la penitencia y luego del mediodía preparar los platos con ingredientes marinos, queso, leche, papaliza y otros.
Asimismo, el recojo de hierbas medicinales también se realiza en estas fechas que tendría el poder de curar enfermedades pues se encuentran bendecidas por Cristo.
En tanto, para los que no pudieron acudir a los cerros, en el centro de la ciudad los comerciantes vendieron espinas, coronas, hierbas y otras alusivas a la fecha.
Cabe precisar que similar situación se repitió en varias provincias y distritos de la región Puno como en el distrito de San Miguel donde su población visitó al cerrito Pojracasi, ubicado en la urbanización del mismo nombre en la salida a Cusco.