El 3 de enero de 2023 mediante Resolución de Alcaldía 10-2023, el arquitecto Axel Luis Quiroz Molina fue designado como gerente de Desarrollo Urbano de la Municipalidad Provincial de San Román (MPSR). Pero, ni aún adulterando documentos, logró pasar la valla impuesta por el Servir desde el 18 de mayo de 2022.
Aquella fecha se aprobó el reglamento de la Ley 31419, documento que establece las disposiciones para garantizar la idoneidad en el acceso y ejercicio de la función pública de funcionarios y directivos de libre designación (a dedo).
La Contraloría General de la República, ya el año pasado observó a Quiroz Molina y otros funcionarios de esa comuna, quienes no reunían los requisitos para dichos cargos.
La situación del referido arquitecto es más grave, porque el órgano contralor en su Informe 034-2023-OCI “Verificación de los requisitos e impedimentos para el acceso y ejercicio de la función pública”, no detectó algo que linda con el delito.
La Contraloría advierte que Quiroz Molina “No cumple” su experiencia específica de 3 años, dado que solo acreditó “5 meses y 18 días (no se advierte fecha de culminación de experiencia, por lo tanto, no es posible efectuar el cómputo)”. “Tampoco cumple 1 año de experiencia en puestos o cargos de dirección en el sector público o privado”.
CERTIFICADO ‘TRUCHO’
No obstante, la experiencia de 1 año en el sector público la cumplió con creces gracias a un certificado de consultor externo que lo legitima desde el 10 de enero de 2011 hasta el 30 de agosto de 2014. El certificado lleva la firma y sello del exdirector regional de Vivienda, Abelardo Pompeyo Quispe Huanacuni.
Sin embargo, dicho funcionario no ocupaba la dirección hasta esa fecha, ya que el expresidente regional Mauricio Rodríguez aceptó su renuncia el 6 de agosto de 2014.
Una de las situaciones más notorias de la adulteración, se ve en el membrete de dicho certificado que no es el que usaba entonces ni ahora la Dirección de Vivienda. A simple vista se observa que es el que usa el Ministerio de Vivienda.
Sin Fronteras se contactó con el aludido Abelardo Quispe, quien no quiso deslindar sobre la adulteración del certificado.
“… Mira, cuando hay este tipo de dudas lo que corresponde es cursar un documento… vas a disculpar, son hace muchos años, ya no laboro. A mi ve van a cursar y yo voy a responder”, dijo.
Le remitimos vía whatsapp el certificado en cuestión oyendo las dos características que cuestionan su veracidad, pero se negó en responder. “No voy a revisar ningún documento en este momento”, dijo, pero sí los vio, tampoco contestó por esa red.
Días atrás, también entrevistamos al aludido Axel Quiroz, quien en tono nervioso dijo que eran verdaderos y cuando le advertimos las incongruencias atinó a decir que era un error de fechas.
“Yo he trabajado hasta esa fecha, el arquitecto, en todo caso, él se ha equivocado”, aseveró.
ADULTERADO
Este medio también hizo trámites ante la Dirección Regional de Transportes y Comunicaciones (DRTC), entidad a la que está adscrita la Dirección de Vivienda, y allí, recién el fin de semana nos confirmaron que el certificado era burdo, que no son los que entregaban en el 2014 ni mucho menos ahora.
“A simple vista no es, además la Dirección de Vivienda no valida tantos predios… allí (en el certificado) dice tres mil tasaciones de predios rurales y urbanos ¿dónde? Que yo sepa, se pudo hacer unos cuantos pero no en esa cantidad. El certificado está mal, deja entrever que laboró de manera ininterrumpida ¿Cómo un consultor externo puede cubrir tanto?”, expresó sonriente un funcionario de ese sector.