Pese a que el año pasado más de 4.500 hectáreas fueron consumidas por el fuego en aproximadamente 69 incendios que afectaron la flora y fauna de la región, Arequipa no cuenta con un plan de emergencia ante estas incidencias. Así lo informó el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR).
De acuerdo a Felipe González Dueñas, administrador técnico de SERFOR, un plan de emergencia permitiría brindar una respuesta adecuada y oportuna ante los siniestros, que ocurren cada año. Por ejemplo, solo en 2023 se perdieron 100 hectáreas de bosques de queñuales. Esta especie es importante para el ecosistema, pues captura agua del aire y luego suelta excedentes en el suelo, que forman pequeños riachuelos y manantiales que benefician a otras plantas.
Para remediar esta situación, en 2019 Serfor remitió un proyecto, avanzando con la parte técnica al 80%, al Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER). Quedó pendiente el presupuesto para su ejecución, lo cual es responsabilidad del Gobierno Regional de Arequipa (GRA). Sin embargo, hasta la fecha el COER no culmina el plan de respuesta temprana, lo que deja vulnerable a la región ante nuevos incendios forestales.
Según la entidad regional, los retrasos se producen debido a que delegaron el plan a la Autoridad Regional del Ambiente (ARMA).
Es importante mencionar que en la región Arequipa, solo en diciembre de 2023 se produjeron 4 incendios que ocasionaron la perdida de 248 hectáreas de pastos naturales. Estos se produjeron en el sector del Cóndor, distrito de Cahuacho (Caravelí); en la irrigación Misti, en Chiguata; sector Ichipampa (Caylloma); y en la zona de Ccasa, en el distrito de Puyca (La Unión).