El alcalde del distrito de Acora, Hernán Crisisto Aycaya, se vuelve a encontrar «en el ojo de la tormenta» debido a presuntos malos manejos de bienes del Estado. La desesperación del burgomaestre llegó hasta el punto de emitir un pronunciamiento responsabilizando al exsubprefecto.
El alcalde es acusado de que posibles mujeres de confianza presuntamente lo trasladaban en una camioneta Toyota Hilux blanca desde el palacio municipal hasta el taller municipal durante los meses de marzo, abril, mayo, junio, julio y agosto.
Estas indagaciones forman parte del caso del grifo clandestino en el taller municipal de Acora, donde se realizaban cargas de combustible ordenadas desde instancias superiores.
La masificación de la información por las redes sociales ameritó que la comuna distrital emita un comunicado, en donde se le acusa al exsubprefecto Alcides Castro, de estar de tras de las denuncias públicas.