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Se vienen represas de Iruro y Yanapujio

La represa de Iruro otorgará agua para los pobladores de la provincia de Caravelí.

La represa de Iruro otorgará agua para los pobladores de la provincia de Caravelí.

Dos de los cuatro megaproyectos de infraestructura hídrica que ejecutará el Gobierno central, como parte del nuevo plan de reactivación económica, beneficiarán Arequipa. Se trata de las represas de Iruro, ubicada entre Ayacucho y Arequipa; y Yanapujio, entre Moquegua y Arequipa.

De acuerdo a Abelardo Meza, jefe de la Unidad Zonal Arequipa del Programa Subsectorial de Irrigaciones (PSI), institución a cargo de ambos proyectos, las obras de la represa de Iruro iniciarán en abril de 2024, y la de Yanapujio en 2025.

En el caso de la represa de Iruro, esta megaobra fue declarada de necesidad pública por el Congreso en 2018; sin embargo, retrasos con la expropiación de predios, entre otros, terminaron por retrasar su ejecución por más de 5 años.

Pese a ello, Meza confirmó que esta semana se aprobará el expediente de saldo de obra, documento necesario para el inicio de la licitación, cuya convocatoria se realizará en diciembre. Con estos pasos culminados, el PSI prevé que la ejecución de la obra se inicie en la segunda semana de abril de 2024. El costo proyectado, según el Ministerio de Economía y Finanzas, es de S/ 206 millones.

El plazo de construcción es de 610 días, es decir, menos de dos años, por lo que esta represa de 64 millones de metros cúbicos de capacidad estaría operativa a finales de 2025 o inicios de 2026. Una vez culminada la obra, el impacto que se espera es la irrigación de 10.249 hectáreas de cultivo y 2.675 familias beneficiadas.

Por su parte, el proyecto de Yanapujio, a diferencia de Iruro, aún está a la espera de la aprobación definitiva y elaboración de diferentes estudios. Se prevé que el expediente técnico culmine en febrero de 2024. Luego se debe elaborar el estudio de impacto ambiental, que puede demorar más de un año. De ahí que se estima que en 2025 se estaría ejecutando la obra.

Meza precisó que uno de los inconvenientes de este proyecto fue que en la ubicación original prevista se encontró rocas deficientes y salinas que impedían realizar la obra. Es por ello que la ubicación se trasladó 5 kilómetros aguas abajo, en el distrito de Yunga, en Moquegua.

El Gobierno nacional estima que el costo de ejecución será de S/ 617 millones. Al finalizar la obra, se espera que se irriguen 11 mil hectáreas en el valle de Tambo y beneficie a 3 mil familias de agricultores.

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