Cerca de cincuenta animales murieron en los últimos cinco años en diferentes corrales de Tarata debido al ataque de un grupo de perros salvajes, denunció Paulino Meza, uno de los últimos pobladores de la zona afectados con la pérdida de su ganado.
Dijo que al pedir ayuda en la comisaría de Tarata le dijeron que debía conocer quién era el dueño de los canes.
«No lo sabemos, pero estamos indagando”, aseveró.
“Si se presenta la denuncia hay que saber quién es el dueño (de los perros). Solo haremos un acta de constatación y allí quedará la denuncia, porque los perros no deben ser sacrificados, me dijeron que el perro tiene más derechos que el hombre”, señaló.
Meza aseguró que también se dirigió a la Fiscalía, donde una vez más se cerró toda opción de ayuda.
«El fiscal y la Policía no han reaccionado en favor de las personas afectadas, más protegen a los animales salvajes que matan nuestro ganado”, indicó sin ocultar su indignación.
El ataque de la jauría al ganado de Meza ocurrió la madrugada del pasado 31 de octubre, cuando acudió a su corral en el sector Umute de Tarata y encontró agonizando un ternero. Dijo que se trata de un problema en el que el alcalde provincial Kenny Menéndez Copaja debería intervenir.
“Son más de treinta las personas que perdieron sus ovejas y llamas, solo algunas han denunciado por la aparición de perros peligrosos”, explicó.
La jauría se ubicaría en basurales, detrás del cuartel de la zona, en un terreno cerca del instituto Ramón Copaja, añadió.
El denunciante advirtió que si los peligrosos canes continúan sueltos, seguirán afectando a más personas y la población no podrá tener tranquilidad. “Yo tengo cinco vacas que sobrevivieron al ataque de siete perros”, recordó.
Además señaló que uno de sus vecinos también perdió un animal de su ganado.
«A un toro de propiedad del vecino Arce le comieron parte del cuerpo. Otros diez corderos de mi vecino Arce también fueron atacados en el mismo momento de los hechos con una diferencia de tiempo de diez minutos el día 31 de madrugada”, relató.