Más del 90% de obras en Arequipa corren el riesgo de no culminarse debido a que el Ejecutivo anunció que los proyectos que no se terminen hasta el 31 de diciembre del 2023 no tendrán continuidad presupuestal. Así lo informó el gobernador Rohel Sánchez. Esta decisión, que afecta a todas las regiones, buscará ser revertida por la Asamblea Nacional de Gobernadores Regionales (ANGR).
Este punto, que será abordado el 17 de noviembre en una de las asambleas que organiza el ANGR para tratar sobre la descentralización del presupuesto, para Sánchez está mal planteado, puesto que solo las obras menores se ejecutan en plazos pequeños.
Por ejemplo, la que inauguró ayer en Sachaca, un puesto de salud con un presupuesto de S/12 millones y 240 días de ejecución; las obras de gran envergadura demoran más de doce meses.
PROMESAS DE CAMPAÑA
Más allá de la continuidad presupuestal por parte del Gobierno central, en Arequipa al menos 10 de las 43 obras por administración directa que prometió Sánchez para el 2023, con un presupuesto de S/601 millones, corren el riesgo de no ejecutarse este año ni el próximo debido a que presentan problemas cuya solución no depende de la Región.
Por ejemplo, el saneamiento físico legal de los terrenos, que está a cargo de los municipios. Así lo explicó el gerente de Infraestructura, Alfredo Zirena Uria.
En cuanto a las otras obras, Zirena mencionó que ya se están ejecutando 25 obras bajo administración directa, y que las ocho restantes comenzarán en las próximas semanas.