El jefe del panel de catadores del Concurso Internacional Sol D’ Oro Hemisferio Sur, Marino Giorgetti, dio a conocer que visitó campos de olivo en el distrito La Yarada-Los Palos, donde observó cultivos distintos a los de Europa ya que encontró plantaciones en medio del desierto o en un terreno sin hierbas, aunque destacó su estado.
Consideró que uno de los problemas de Tacna para mejorar la calidad de sus productos olivícolas es el riego, porque el olivo es una planta que no necesita mucha agua, pero en algunas fases sí la requiere para el crecimiento de la aceituna.
“Me dijeron que de agua no estaban bien, ese es un problema porque la planta estaba bien, estaba verde, con la floración muy buena, pero si tienen más agua habrá una producción buena”, destacó.
El especialista italiano mencionó que el cambio climático influye sobre toda la producción de la aceituna y anotó que si no hay lluvias, la aceituna se seca y después el aceite presenta problemas.
“La calidad de aceite es influenciada por la calidad de la aceituna”, declaró al tiempo de agregar que a nivel mundial este año no fue bueno para el aceite de oliva.
Sobre la calidad del aceite tacneño, Giorgetti dijo que no visitó plantas locales, pero recordó que en 2019, en la primera edición del concurso, cató muchos aceites de Tacna de la variedad criolla que eran «muy buenos». Añadió que este año hay más productores que participan en el concurso, lo que expresa que es muy importante para la olivicultura.
“No sé cuántos productores se presentaron, porque en el concurso trabajamos con códigos de la notaría”, declaró al añadir que de 2019 a 2023 hay muchos más productores tacneños que envasaron aceite y cuentan con etiquetado y mayor calidad para competir y aumentar su producción.