Debido al déficit hídrico en la región que ha generado a estas alturas del año una considerable baja en el caudal de las aguas de la laguna Umayo, se ha desatado la preocupación de la población circundante por las consecuencias que está trayendo esta situación.
BAJA EL NIVEL
Según el reporte de las autoridades a la fecha el nivel de la laguna ha descendido hasta en 90 centímetros de sus niveles normales, lo que viene generando dificultades en la población de las comunidades de las partes altas del distrito de Atuncolla, ellos temen que en los próximos tres meses que faltan para que culmine el año se podría secar mucho más lo que haría aún más difícil la situación ya que actualmente con los totorales secos y los «llachos» se han casi acabado para el consumo de los ganados pertenecientes a cientos de familias, ellos aguardan la respuesta de las autoridades locales y provinciales pero las esperanzas se les acaban ya que solicitaron ayuda para paliar la situación con la sequía.
PREOCUPACIÓN
La laguna Umayo está localizada a 35 kilómetros al noroeste de la ciudad de Puno y es muy conocida por rodear al complejo arqueológico de Sillustani.
La población de la zona a parte del turismo que ha decrecido, se dedican a la ganadería, agricultura y la pesca, el lago disminuye su espejo cada año, pero los problemas derivados de la contaminación y las sequías lo han diezmado este año.