Entre ratas y moscas sacrificaban caballos y burros para luego dejarlos remojando en agua y presuntamente distribuir la carne en las ferias de el Altiplano, Avelino y Palomar, según la Policía.
La intervención se realizó la mañana de ayer, cuando los efectivos de la comisaría de Cerro Colorado, al mando del teniente PNP Dante Portilla, acudieron hasta la propiedad «San Lucas», ubicada en el cruce del jirón Cusco (Cerro Colorado), debido a que los vecinos escucharon gritos de una mujer. Cuando los agentes ingresaron a la vivienda para verificar si se trataba de un hecho de violencia familiar descubrieron con sorpresa que se trataba de un camal clandestino.
«Ingresamos y lo primero que observamos fueron caballos, burros y trozos de carne», dijo Dante Portilla.
En el lugar se encontró 150 cabezas de animales, entre ovejas, toros, burros y caballos, listos para ser sacrificados. También hallaron un caballo recientemente descuartizado. Su carne estaba en tres tinas. En otro ambiente se halló 50 sacos que contenían esqueletos de los animales que fueron incinerados.
Los 11 burros que hallaron estaban con llagas en la piel y tenían un estado insalubre.
La Policía detuvo a Gumercindo Villa C. y a Agustina Chise O., quienes son investigados por el delito contra la salud pública. Personal de la comuna de Cerro Colorado procedió a clausurar el camal clandestino.