Este 2 de abril hemos conmemorado el Día Mundial de la Concienciación del Autismo, que es un trastorno del neurodesarrollo que afecta principalmente tres aspectos esenciales en los más pequeños. La comunicación, la cual se da en dos niveles: cuantitativo, poco o ausencia del lenguaje; y cualitativo, el lenguaje es poco eficaz o no es bueno (fluidez, ritmo, gramática, uso de artículos, etc.).
Las habilidades sociales, con poca o baja interacción social. Y en algunos casos la cognición, con intereses muy poco variados, estereotipados y sumamente repetitivos. El TEA es un trastorno que tiene distintos niveles, los cuales nos permiten clasificarlo y poder dar la ayuda adecuada.
Lamentablemente, es un trastorno con el que se convive de por vida. Se manifiesta en forma distinta en cada persona que lo padece. Puede presentar unos brillos de genialidad en algunos casos con la adecuada detección temprana e intervención psicopedagógica.
¿Y por qué se da el autismo? No sabemos por qué se produce el autismo. Hay un componente hereditario fundamental que se observa en los pequeños que lo tienen; es decir, algún familiar lo sufrió antes. También se da cuando es prematuro, ha presentado problemas de infección o accidente cerebral temprano.
¿En qué momento se puede sospechar de TEA en nuestro pequeño? De acuerdo a la edad de desarrollo, los signos de alarma son debido a un retraso cognitivo, problemas en su desarrollo, ausencia del lenguaje, el que no te siga con la mirada, un bebé que siempre está llorando o durmiendo excesivamente, atención sostenida y poco usual por objetos o partes de estos, no hay una atención compartida. Por lo general, los bebés tienden a imitar. En estos pequeños observamos mucha “independencia”. Claro, cada niño tiene un proceso distinto de desarrollo.
La gran mayoría reconoce su nombre, más un niño con TEA no responde a su nombre o se le tiene que llamar repetidas veces. No hay el juego imaginativo, no le llaman la atención otras personas, no interactúan en forma adecuada con niños de su edad. Y cuidado si antes tu niño aprendió hacer algo y lo olvida de la nada. Si detectas o sospechas que tu pequeño tiene autismo, el profesional que puede ayudarte es un neuropediatra o una psicóloga infantil.
En Súmac Guagüitas contamos con profesionales capacitados y entrenados para apoyarte y darte la ayuda que necesites con tu niño.
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