El alcalde de Tarata, Kenny Menéndez Copaja, protestó por el traslado de un nuevo grupo de internos de alta peligrosidad al penal de Challapalca, ubicado en la provincia andina, señalando que se trata de personas que originan un grave daño por inseguridad en agravio de la población.
Consideró que las autoridades deben unir esfuerzos para cambiar el clima de inseguridad que hace muchos años afecta a la región Tacna.
“Por eso vemos constantes robos y asaltos con consecuencias fatales”, aseveró.
El burgomaestre dijo que los reclusos de Challapalca gozan de comodidades, mientras que pueblos enteros cercanos al penal no cuentan con servicios de electricidad, agua o internet, y menos telefonía celular.
“Es costumbre del Estado tratar a Tacna como el patio trasero del país, y eso tiene que acabar mediante el diálogo para que entienda y cambie las reglas de juego de los penales cerca de las poblaciones”, indicó.
Recordó que en Challapalca cumplen condena reos como el holandés Joran van der Sloot, condenado por asesinato, y muchos otros con un pasado repleto de actos delictivos.
“Por ser un penal de máxima seguridad traen a escorias sociales que luego cometen asaltos y robos. En mi condición de alcalde protesto y pido que se considere la seguridad para la población de Tacna y los límites que están cerca de Challapalca”, indicó Menéndez, quien señaló que Tarata se ve en peligro por la presencia de los familiares de estos delincuentes, quienes constantemente pasan por la localidad andina.
«Lo rechazamos y pedimos explicaciones al Gobierno, cuya obligación es redoblar la vigilancia para dar bienestar de la población”, indicó.
“En (el penal de) Challapalca hay energía eléctrica y comunicación celular una vez por semana para los reclusos, y a siete kilómetros el centro poblado Kallapuma no tiene energía. Por eso estamos luchando para que el Estado ejecute la electrificación en las zonas altas y pueblos alejados de la sierra tacneña”, finalizó.