Un sorprendente hallazgo se dieron los agentes del Grupo Terna de la Policía Nacional del Perú (PNP) en Puno cuando al realizar una intervención de rutina por identidad a tres jóvenes que se encontraban bebiendo licor en la zona del mirador Manto, ubicado cerca a la urbanización Las Torres de San Carlos. Uno de ellos, que sería repartidor de una reconocida empresa de delivery, llevaba una momia en la mochila térmica.
INSÓLITO
los agentes intervinieron a Diego Luque Mamani (23), Yeral Cartagena Bustincio (26) y a Julio César Bermejo Angles (26), los agentes notaron que este último llevaba una mochila de delivery y al revisarla se encontraron con restos humanos aparentemente de carácter histórico, el intervenido señaló a los agentes que esa momia era de su propiedad. Debido a la naturaleza del hallazgo los agentes se comunicaron de inmediato a la Fiscalía de Turno con la fiscal Milagros Quico López y además con un representante de la Dirección desconcentrada de Cultura de Puno para que se trasladen a la zona del hecho. Luego de las diligencias iniciales, el personal de Cultura certificó que se trataba de una momia lo que significaba que sería un bien patrimonial cultural pero que habría estado en riesgo probable de afectación por una protección inadecuada.
DELITO
Los agentes señalaron que los tres intervenidos se encontrarían inmersos en el presunto delito contra el patrimonio cultural y por ello se iniciaron con las investigaciones.
EN VENTA
Al lugar de los hechos también se hicieron presentes el abogado y familiares del joven que dijo que la momia era propiedad de su familia. Según las primeras versiones estos restos aparentemente provienen del distrito de Patambuco, en la provincia de Sandia, habría estado en posesión de la familia del repartidor de delivery por, aproximadamente, 30 años.
CONEXIÓN CON MOMIA
Asimismo, Julio César dijo que intentaron donarla al Museo de Puno a cambio de una cierta cantidad de dinero; sin embargo, esto no se concretó. «Mis amigos querían verla antes de donarla al museo, por eso la traje acá», señaló. Pero luego comenzó a contar historias de que por tener estos restos en su casa siente una especie de conexión o «energía» de la momia. «Está en mi cuarto, es mi amigo… yo lo cuido, cuando me porto mal me jala las patas, se siente una energía», narró.
DILIGENCIAS
Debido a la naturaleza del hallazgo se realizaron coordinaciones entre la Fiscalía y el Ministerio de Cultura para las diligencias en relación a este bien histórico mientras que los tres intervenidos serán investigados por las autoridades para determinar su grado de responsabilidad y cómo se obtuvo estos restos de acuerdo a la versión del propietario.