Un día después del horrendo asesinato de dos ancianos en el anexo Cerro Blanco del distrito de Calana, el área de Homicidios del Depincri estableció que fue un crimen por encargo o sicariato y descartó que el móvil fuera un robo.
Como se recuerda, la mañana del último domingo Balbino Chacolla Mamani (89) y Gregoria Fransisca Sanga Cunurana (84) fueron hallados muertos sobre su cama con múltiples heridas punzopenetrantes.
La necropsia en la morgue central reveló este lunes que el varón sufrió seis puñaladas en el tórax y la mujer 12 con un arma blanca, siendo ultimados con gran crueldad pese a tratarse de ancianos que no se hubieran resistido a un asalto.
Los familiares declararon también que los responsables no se llevaron nada y la familia no ostentaba riqueza o bienes costosos.
El jefe del Departamento de Investigación Criminal, coronel PNP Manuel Guerrero Serpa, indicó ayer que la pareja habría sido víctima de homicidio calificado y se tienen algunas hipótesis que serán contrastadas en las próximas horas ya que la familia tenía problemas por terrenos.
Se supo que los fallecidos estaban en disputa del predio donde fueron encontrados.
Investigadores del área de Homicidios volvieron a la escena del crimen en Calana este lunes buscando más evidencia para identificar a los criminales y a quién los habría contratado.