El presidente del Perú, Pedro Castillo Terrenos, pasó un mal rato en su llegada a la Ciudad Blanca. En su visita al Hospital III de Yanahuara recibió pifias y gritos de ‘corrupto’ y ‘ladrón’ por parte de los ciudadanos que se encontraban en el lugar. Además, le pidieron que renuncie a la presidencia y se retire de Arequipa.
Los policías evitaron que las agresiones verbales lleguen a mayores y abrieron paso al vehículo donde se trasladaba el mandatario para que este ingrese al nosocomio, donde actualmente se hace trabajos en el área de la Unidad de Cuidados Intensivos pero con mucha demora porque llevan de retraso más de 1 año y 4 meses.
Luego de esta visita, el mandatario se trasladó al distrito de Sachaca, donde se inauguró el Observatorio Vulcanológico del Instituto Geofísico del Perú (IGP). La obra fue gestionada en el mandato de Ollanta Humala con una inversión de S/ 19 millones para monitorear 13 de los 16 volcanes activos del país.
En la inauguración, en donde también estuvieron presentes la gobernadora regional Kimmerlee Gutiérrez, el prefecto Yéremi Torres, entre otras autoridades, Castillo exhortó a los ciudadanos comprometidos con la ciencia a continuar apostando por el desarrollo del país porque la educación es el único camino. También pidió a las nuevas autoridades que prioricen el sector Educación de ganar las elecciones.
En cuanto a la región, el mandatario solo refirió que hay proyectos de educación y salud para Arequipa, pero no especificó cuáles. Asimismo, dijo que solicitará una reunión con la gobernadora y los alcaldes para buscar una solución a la problemática en Agricultura.
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Respecto a su situación legal y el pedido de inhabilitación de la función pública durante 5 años por traición a la patria, Castillo evitó responder cualquier tipo de pregunta y agregó que esos temas no son importantes para la población.