La depredación de los productos hidrobiológicos y el mal tiempo vienen afectando la economía de unas quinientas familias de la caleta Vila Vila, señaló el poblador de la zona Carlos Quispe Fráquita.
Según explicó, se necesitan medidas urgentes para la preservación de los recursos marinos. “Hay bastante depredación por parte de embarcaciones de orilla principalmente. Ya no existe la diversidad de peces de años anteriores, como la caballa y jurel, que van desapareciendo”, añadió.
Quispe Fráquita refirió que existe poco control para evitar la depredación, que se acentuó en los últimos años en la zona del litoral de Tacna. Señaló que de las 500 naves en orilla apenas salen 200 embarcaciones y solo una parte llega a capturar un promedio de 500 a 700 kilos de bonito.
Al referir que la pesca no es buena, precisó que la pota es escasa debido al clima. “Hay embarcaciones que piden que sea libre la captura, lo que pondría en riesgo la producción futura de hidrobiológicos”, comentó. Más adelante señaló que fue una mala decisión de la Corte de La Haya haber dejado a Tacna sin mar.
“Solo a tres horas de viaje recién podemos tener espacio para trabajar en el mar hasta el límite con el mar chileno, recién (en Ite) dobla la línea hacia las 200 millas”, señaló.
En tanto, el bonito está siendo depredando debido a que se extrae más de lo debido, y eso es un problema para la población dedicada a la pesca de Vila Vila y Morro Grau, advirtió el poblador del litoral, quien indicó que “el precio en plataforma del bonito es de 3 soles por kilo, y el tiburón al mismo precio. El otro problema es que los alimentos de la canasta familiar suben, menos el pescado”.
Dijo que entre los trabajos de mayor necesidad para los pescadores de Vila Vila está la mejora de la infraestructura del desembarcadero, colocando un punto de enclave de las embarcaciones. Morro Sama ya está por colapsar debido al exceso de embarcaciones, advirtió.