Tacna. El pequeño Rodrigo T. H. (8) perdió la vida cerca de las 19:00 horas del último viernes en el hospital de Essalud debido a las lesiones irreversibles que sufrió tras el violento choque de un vehículo de servicios funerarios contra el auto en el que viajaba junto con su padre y hermana. La devastada familia participó en el velorio la mañana de este sábado en el Colegio Médico, ubicado en la calle Billinghurst, y por la tarde trasladó el féretro al cementerio Parque del Recuerdo de Calana, donde se despidió de Rodrigo.
Representantes del colegio Cristo Rey, donde estudiaba el niño, así como de un club de danza y del hospital Daniel Alcides Carrión, donde laboran los padres del pequeño, entre otras instituciones, hicieron llegar sus condolencias por la pérdida.
El accidente ocurrió la tarde del jueves, cuando el menor se dirigía a clases de marinera en el polideportivo de Pocollay junto con su hermana Luana T. H. (10) en un auto de placa Z6N-470 conducido por su padre, Obed Torres Vargas (50). En la avenida Celestino Vargas un vehículo de la funeraria Corina de placa Z5D-604, conducido por Roberto Rodrigo Paredes Piérola (35), chocó violentamente contra la parte posterior del auto de la familia.
Transeúntes forzaron las puertas de la unidad destrozada para rescatar al niño en estado inconsciente con el fin de que sea trasladado al hospital de Calana junto con su hermana y padre, quienes resultaron con fuertes golpes. Lamentablemente el pequeño quedó con muerte cerebral por una hemorragia intracraneal, además de sufrir fracturas en el cuerpo, y falleció.
Cabe indicar que el conductor del vehículo funerario que habría causado el accidente, Roberto Paredes, fue detenido al conocerse que su licencia de conducir fue retenida en 2020 por manejar un vehículo en estado de ebriedad.