El congresista puneño Óscar Zea presentó su renuncia irrevocable a la bancada de Perú Libre; en el documento dirigido a Waldemar Cerrón, vocero del grupo parlamentario, el legislador no precisó los motivos que lo llevaron a tomar esta decisión y se limitó a señalar «Por razones de principios y de conciencia».
CORTA GESTIÓN
Óscar Zea fue nombrado ministro de Desarrollo Agrario y Riego a inicios de febrero, permaneció en el cargo menos de cuatro meses, su cambio fue repentino y fue sustituido por Javier Arce Alvarado.
Durante la gestión de Zea como ministro tuvo como secretario general del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), a Paul Jaimes Blanco, quien disponía por mensajes de WhatsApp, los cargos importantes de ese sector, uno de ellos fue enviado a la entonces jefa nacional de Agroideas, María Israel, para que designe a Rosa Mamani Rodríguez como jefa de esta institución en Puno, lo cual no obedeció porque no cumplía con los requisitos mínimos para el cargo. La funcionaria fue separada luego por no acatar la orden.
La recomendada era cónyuge de Javier Álvarez Suaña, gerente de Inca Genetics SAC, la empresa que hasta el 7 de julio de 2021 estaba bajo la gerencia de Zea Choquechambi. El controvertido Paul Jaimes ahora habría vuelto como asesor del congresista puneño en el Congreso.
AJUSTAN CUENTAS
Según una fuente del mismo partido Perú Libre, Óscar Zea estaría perdiendo respaldo y muchos lo ven como un enemigo partidario, además existiría la convicción de que debe responder por las presuntas anomalías de Jaimes, su secretario general cuando era titular del Midagri, además por el conflicto de intereses al haber contratado con el PEBLT, la empresa de su propiedad y por las denuncias de cupos en entidades a sus allegados.
CISMA EN EL PEBLT
Por otro lado, otro funcionario que estaría en la cuerda floja es Julio Wilder Carcausto Ñaupa, director ejecutivo del Proyecto Especial Binacional Lago Titicaca, habría perdido piso luego de la salida de Zea y hay descontento con su magra gestión.
¿LOS MOTIVOS?
Una fuente de Perú Libre dijo a Sin Fronteras que los últimos días Zea buscó contacto con el presidente Pedro Castillo a fin de que respeten algunos ‘cupos’ suyos en diversas instituciones, pero que el mandatario no le habría dado cara, por lo que consideró vengarse.