El cónsul general de Chile en Tacna, Alejandro Gibbons Munizaga, calificó como positivos los primeros días de la reapertura de la frontera terrestre Perú-Chile, comentando que «la gente se dio cuenta de cuánto nos necesitamos, eso lo generó la pandemia».
Fue muy gratificante ver a familias reunirse y que peruanos y chilenos regresen a Tacna, añadió.
El diplomático chileno considera que pese a que hubo algunas quejas, todo se puede mejorar porque no existe la intención de molestar a los viajeros. Anotó que el trabajo en los complejos fronterizos se desarrolla muy bien.
«Que pasen 1400 personas a Perú y 700 a Chile es memorable, hay que agradecer a esos funcionarios porque después de dos años se logró la reapertura con un control integrado, eso es bastante loable porque da agilidad (al flujo migratorio)», comentó.
El representante consular refirió que existe confianza en que las cifras del tránsito por la frontera vayan en aumento, más aún porque las autoridades chilenas van en la línea de integración y tienen la idea de generar mayores facilidades de migración a su país.
Las coordinaciones son permanentes, no de ahora sino desde la epidemia del virus de la COVID-19, añadió.