Con una intensa persecución la Policía Nacional capturó un taxi en el que se trasladaba una banda criminal. Dos sujetos lograron darse a la fuga, pero se detuvo al chofer con distintas autopartes y a corta distancia se recogieron herramientas para cometer robos. El vehículo station wagon blanco de placa F0L-150, con casquete de radiotaxi Perú, fue detectado circulando a velocidad excesiva por la avenida La Cultura la noche del domingo.
Cuando policías ordenaron al chofer detenerse, este aceleró la marcha de la unidad, desatando una persecución por las asociaciones de vivienda Vista Alegre y Villa La Pradera, en el cono sur de la ciudad. El taxi se detuvo en el camino para que dos hombres desciendan, los cuales corrieron en diferentes direcciones logrando desaparecer.
El conductor Ángel Elías Apaza Avendaño (33) quedó finalmente detenido con su vehículo por ser presunto integrante de la banda delictiva. En su unidad los policías encontraron una batería, una consola, un filtro de aire y otras autopartes, cuya procedencia el sospechoso no supo explicar. Por otro lado, en la calle Arnaldo Pinazo se encontró un morral abandonado en la pista que contenía un «peine», objeto usado para abrir puertas de vehículos, además de desarmadores y alicates que tendrían la misma finalidad. Los vecinos indicaron que el bulto fue lanzado del taxi cuando era perseguido por los patrulleros.
El investigado Ángel Apaza Avendaño fue trasladado a la comisaría de Gregorio Albarracín y luego derivado al Departamento de Protección Vehicular (Deprove) para que confiese por qué ayudó a los ladrones a huir y si también pertenece a la banda.