El sonido ensordecedor de tres disparos de bala causó pánico entre los vecinos de la segunda cuadra de la avenida Jesús del centro poblado de Alto Puno. Aquellas percusiones ejecutadas por unos asaltantes, acabaron con la vida de un empresario dedicado a la venta de artículos de ferretería.
El sangriento hecho se registró el último viernes pasadas las 19:00 horas, en la ferretería de Celestino Velizario Amanqui (42), ubicada en la avenida antes mencionada, a la altura del jirón Monterrey. Trascendió que el dueño al parecer iba a cerrar su negocio, cuando de pronto un grupo de sujetos fuertemente armados, lo sorprendió.
Aparentemente, el empresario se habría resistido al atraco, por lo que los malhechores le dispararon a quemarropa. Los asaltantes salieron raudos del local y habrían abordado un auto color rojo; sin embargo, otros dicen que la huida fue en una camioneta de color plomo.
Según algunos testigos, la fuga de los hampones, habría sido visto por la madre del infortunado varón. La progenitora habría pedido ayuda desde una ventana del segundo piso de la casa.
Enterados del hecho, la Policía habría implementado el Plan Cerco para intervenir a cualquier sospechoso. Otro equipo de agentes se trasladó hasta el local de la ferretería para realizar las primeras investigaciones. Con la llegada del fiscal y del personal de Criminalística, se procedió a examinar la escena del crimen.
Trascendió que el cadáver presentaba dos heridas de bala; una a la altura del lado derecho del pecho, y la otra a la altura de las costillas del lado izquierdo. Los detectives investigan si se trata de dos disparos o la continuación de uno que pudo tener un ingreso y salida en el cuerpo.
Los moradores recordaron a Celestino Velizario, como un hombre trabajador. Dicen que no tenía pareja ni hijos; pero sí una madre y hermanos quienes sufren por su muerte.
Al cierre de esta edición, se desconocería si los malhechores lograron llevarse alguna fuerte suma de dinero u objetos de valor.