¡Dura paliza! Una pareja de delincuentes recibió un feroz castigo y por poco han sido quemados tras ser descubiertos arrojando a un parroquiano desde un mototaxi a quien ‘pepearon’ para robarle su dinero y pertenecías.
La enardecida turba también incendió la «moto torito» que los delincuentes utilizaron junto a dos cómplices para cometer sus fechorías; los dos secuaces lograron fugar.
VÍCTIMA DE ‘PEPEO’
Cerca de las 9:30 a.m. de ayer, los vecinos de la urbanización Los Ángeles, a cuatro cuadras aproximadamente del Terminal Terrestre de la ciudad de Juliaca, capturaron al sujeto y la fémina infraganti arrojando inconsciente a su víctima.
El agraviado de nombre Nelson Omar Z.M. (33), quien fue ayudado por los vecinos, aún delicado, indicó que los supuestos delincuentes le robaron 8 mil soles, y sus bienes tras ser dopado por la fémina tras asistir a un local del jirón Piérola con Circunvalación.
CAPTURA
Es así que los vecinos organizados contra la delincuencia y cansados de los constantes robos y asaltos que hay en su barrio, retuvieron el mototaxi de color azul y blanco y capturaron a la presunta «pepera» y a su cómplice.
Los acusados fueron identificados como Luis Alberto Quispe Mullisaca (27), y Yoviza Salazar Churacutipa (35), según los archivos periodísticos, la fémina fue capturada por la Policía Nacional en el 2019 por robar 50 mil soles junto a una banda de asaltantes.
Ambos fueron amarrados a un poste de alumbrado público de la esquina del jirón Pumacahua. Ahí les propinaron puñetes y patadas en el cuerpo y rostro y los dejaron semidesnudos; los ojos y labios los tenían hinchados por la golpiza, mientras el mototaxi era devorado por el fuego.
La turba enardecida exigía a los supuestos delincuentes que regresen el dinero y digan los nombres de sus cómplices que escaparon, pero no tuvieron éxito. Luego, les echaron barro y los azotaron con correas de cuero, pese a las lágrimas y súplicas de la presunta «pepera», los vecinos no tuvieron compasión.
LOS PASEAN
La fémina y el individuo descalzos fueron paseados por varias cuadras; en el camino los seguían flagelando. Según los vecinos está es una señal de advertencia para los malhechores que se atrevan a ingresar al barrio Los Ángeles.
Tanta era la furia de los vecinos que no permitieron que los serenos y la Policía Nacional intervengan, pese a que había un fuerte continente policial. Tampoco permitieron que periodistas o civiles saquen fotos o filmen libremente el linchamiento.
DIFÍCIL RESCATE
El comandante PNP de la Comisaría Sectorial, Juan Claudio Escobar Prado, y la fiscal del Ministerio Público, llegaron al lugar para calmar a los vecinos y dialogar con ellos por más de para que liberen a los forajidos y así rescatarlos.
La fémina aceptó que trabaja como dama de compañía en uno de los night club del jirón Piérola, y el individuo trabaja ahí como vigilante.