Conforme pasan los días se descubre que el exsecretario de Pedro Castillo, Bruno Pacheco, no solo guardaba dólares de procedencia dudosa en un baño de Palacio, sino que además estafó a humildes pobladores de un asentamiento humano del Rímac, del que él era dirigente.
La indignación contra este individuo es mayúscula por su actuar delictivo para quien la legisladora Norma Yarrow exigió que le caiga la justicia, aunque dudan que la fiscal de la Nación Zoraida Ávalos Rivera tome medidas al respecto.
“Qué tal joya resultó ser Bruno Pacheco: como secretario general de un asentamiento humano del Rímac, se quedó con la plata de los vecinos. Como secretario general de Palacio, escondía 20 mil dólares en el baño y de manejar un Tico pasó a una lujosa camioneta de propiedad de un proveedor del Estado. Creen que el Perú es su chacra? escribió NormaYarrow.
El caso es que los vecinos del asentamiento humano Mariscal Castilla acusan al ex brazo derecho de Castillo Terrones de apropiarse de no menos de S/ 20 mil que era producto del alquiler de losas deportivas y un local comunal.
Vecinos del asentamiento humano Mariscal Castilla acusan al ex secretario general de Palacio de Gobierno de apropiarse del dinero generado por los alquileres de losas deportivas y un local comunal
Un reportaje de Punto Final recoge los testimonios de los vecinos sobre la labor de Pacheco como secretario general del asentamiento humano Mariscal Castilla, en el Rímac, durante cuatro años.
La gran mayoría de residentes lo acusan de apropiarse del dinero generado por los alquileres de las losas deportivas y un local comunal. Incluso, indican que dejó el cargo sin rendir cuentas de los ingresos económicos y no concretó las obras proyectadas en favor de los vecinos.
Los cuestionamientos de los vecinos se ven plasmados en una carta notarial, de fecha del 15 de septiembre del 2014, enviada a Bruno Pacheco para que convoque a elecciones, calificándolo con adjetivos irreproducibles.
De acuerdo a los vecinos, Pacheco se habría metido “al bolsillo” dinero del barrio que estaba pensado para los arreglos de las losas deportivas y un local comunal. Además, lo acusan de no “rendir cuentas” durante su gestión.
Fue tanta la incomodidad de los vecinos que el 15 de septiembre del 2014, los residentes del asentamiento humano Mariscal Castilla se organizaron y enviaron a Pacheco una carta notarial exigiendo que dé cuenta de su gestión y, además, solicitaban que renuncia al cargo. La carta tenía la firma de 200 vecinos.