En sesión extraordinaria del Concejo Provincial de Tacna realizada la mañana de este martes se aprobó la ordenanza que aprueba la modificación de la ordenanza 011-2016, que regula el servicio de transporte público urbano en la ciudad, una iniciativa cuestionada por transportistas y algunos regidores.
La propuesta, aprobada en la comisión de Transporte, fue expuesta por el regidor Marcelino Chipana, quien defendió el texto que considera el reglamento complementario para la prestación del servicio de transporte urbano y la tabla de sanciones, además de delimitar las funciones de la municipalidad y los transportistas.
Uno de los principales cuestionamientos hechos por el regidor Juan Inquilla durante la sesión de concejo fue que la ordenanza pretende modificar el reglamento aprobado a nivel nacional condicionando la renovación de tarjetas de circulación vehicular de taxistas y líneas de transporte al pago de deudas por infracciones, cuando esto es automático, así como las intenciones del municipio de influir en las frecuencias de las rutas, cuando cada empresa de transporte las determina de forma autónoma.
“Lo que pretende la municipalidad es saltarse una ley del gobierno nacional y poner sus propias condiciones al momento de regular el transporte, perjudicando a los transportistas. Muchos de ellos ni siquiera reconocen a los dos dirigentes con los que supuestamente las autoridades han consensuado la nueva ordenanza”, dijo el concejal, uno de los tres que se abstuvieron para deslindar responsabilidades.
Por esta “norma lesiva para el sector”, como dijo Luis Conde Yáñez, secretario general del Sindicato de Conductores de Tacna, hay un proceso judicial en curso del cual hoy se realiza una audiencia.
Los representantes de los transportistas permanecieron a la espera de la decisión del concejo en el frontis de la sede de la comuna provincial. Conocido el resultado presentaron un memorial rechazando la medida y anunciaron el inicio de acciones legales.