Camaná. A pesar de las disposiciones del comando covid-19 de Camaná, sobre la prohibición de las actividades que aglomeren gente, el último sábado unos 150 trabajadores de Construcción Civil festejaban su aniversario en la cancha deportiva «La Revancha».
Esta celebración generó malestar en los vecinos por la bulla que producía la orquesta que se presentaba. La subprefecta de la provincia, Norka Claverías, acudió a intervenir el local en compañía de la Policía, serenos y personal de Fiscalización del distrito de Samuel Pastor.
Los asistentes, en aparente estado de ebriedad, intimidaron a las autoridades. Tras la revisión de la documentación, se constató que las instalaciones deportivas funcionaban con la licencia vencida.
Los protocolos de bioseguridad fueron dejados de lado y se halló gran cantidad de cajas de cerveza. Luego de la intervención, en medio de reclamos de los asistentes, se les conminó a abandonar el lugar.
Más temprano, las autoridades realizaron un operativo en la Av. La Córdova; dentro del local «Charito» se halló en habitaciones a parroquianos con damas de compañía y restos de preservativos. En tanto, en el sector de Bella Unión se intervino un bar informal donde se detuvo a una menor en estado etílico.