Con la finalidad de mejorar la calidad de vida de 4,106 familias rurales en situación de pobreza de 64 comunidades de los distritos de Platería, Acora, Ilave, Pilcuyo y Paucarcolla, una entidad de cooperación canadiense hizo que los propios comuneros construyan 1243 infraestructuras productivas para el desarrollo agropecuario y la seguridad alimentaria.
A lo largo de los últimos cinco años, los directivos del Centro de Apoyo e Investigación para el Desarrollo Campesino (Cindes), edificaron reservorios, salas de ordeño, terneraje, heniles, tanques elevados, bretes e infraestructura para la producción hidropónica, entre otras construcciones que permitieron elevar la calidad de vida.
Hoscar Salas y Mary Guay, dos representantes de Cindes refieren que las obras se canalizaron a los que menos tienen y quieren trabajar, es decir, ellos mismos las edificaron.
PRODUCCIÓN LECHERA
Esto redundó en un beneficio palpable e inmediato. Por ejemplo, con la instalación de pastos cultivados se incrementó la producción de leche con ganado mejorado de 4 a 13 litros por ejemplar.
MEJOR GANADO
También se inseminó a 11,800 vacas, de las cuales nacieron 7,682 crías de buena calidad genética, manejado por mujeres, mientras los cónyuges se dedican a otras labores.
CASAS CALIENTES
Además, con los propios comuneros edificaron viviendas rurales, como las que se hicieron en la comunidad de Molloco del distrito de Acora, cuya característica es soportar el intenso frío que se registra en estas zonas. Estas fueron construidas sobre un área de 60 metros cuadrados.
El costo de la vivienda asciende a 45 mil soles, la misma que será inaugurada mañana lunes 26 de octubre, desde las 11 horas.
CONTRAPARTIDA
Estas obras se lograron gracias a la contrapartida con la mano de obra no calificada, su participación activa y en muchas ocasiones colocaron materiales para ampliar sus infraestructuras. «Estos logros importantes son de ellos, ahora que el proyecto ha concluido nos retiramos satisfechos por los aportes al desarrollo agropecuario y el mejoramiento de su calidad de vida, dándoles herramientas necesarias para la transformación de la producción primaria», declaró Mary Guay.
AGRADECIMIENTO
Por su parte, Elena Mamani, usuaria del proyecto de la localidad de Collacachi, recuerda que la producción de leche en su hato era muy baja, ahora han triplicado porque disponen de pastos cultivados y de infraestructura como henil, bretes, sala de ordeño y tanque elevado y otros, con la cual incrementaron sus ingresos para su familia. Ella y los beneficiados agradecen a la cooperación de Canadá y al Centro Cindes Imsa, por haberles cambiado la vida.