Arequipa. Más de mil familias del asentamiento humano Villa Confraternidad del sector Canteras (Alto Selva Alegre) no cuenta con el servicio de agua potable durante nueve días. Un grupo de ellas protestó ayer en las instalaciones de Sedapar, situado en calle Virgen del Pilar del Cercado de Arequipa. Ellos temen que puedan contagiarse con el covid-19, debido a que lavarse las manos resulta imprescindible para evitarlo.
La empresa Sedapar, sin embargo, comunicó que la suspensión del servicio de agua potable se debe a que se inhabilitó una conexión clandestina de 4 pulgadas hallada en el año 2017. Y que, según la entidad, la reposición del servicio está condicionada al pago de la deuda de 100 mil 507 soles por concepto de recupero y perjuicio económico anual a la empresa. Hasta que eso no ocurra la entidad prestadora del servicio les ofrece comprar bonos para ser proveídos de agua potable por medio de cisternas.
El comunicado, además, precisa que el dirigente zonal Vladimiro Sucapuca Quinto estaba enterado de esa condición y de otras, como presentar una copia del expediente técnico por el cual solicitaban el servicio. El directivo barrial, al parecer, no habría cumplido con ninguno de los requisitos para que se retome el servicio de necesidad básica.
Por tal motivo, funcionarios de la empresa Sedapar informaron que no es posible acceder a su demanda de dejar sin efecto el corte de la conexión clandestina porque incurrirían en un acto ilegal.
Por su parte, el regidor del municipio de Alto Selva Alegre, Rusbel Gutiérrez Canaza, se comprometió a buscar una solución inmediata.