Tacna. Tras la confirmación de la pérdida de cuatro vacunas contra la COVID-19 del laboratorio chino Sinopharm y el siniestro de otra en el hospital Hipólito Unanue, la Procuraduría Anticorrupción de Tacna interpuso la tarde de este jueves una denuncia penal por presunto delito de peculado culposo agravado contra quienes resulten responsables.
Según la acusación, presentada ante la Fiscalía Anticorrupción, las vacunas presuntamente sustraídas habrían estado bajo la administración del comité de vacunación que se encarga del proceso de inmunización de los profesionales de la salud en el departamento desde el 11 de febrero.
La procuraduría presume que los funcionarios y/o servidores que integran el comité habrían actuado con negligencia y descuido, lo que generó la sustracción de las vacunas aprovechando el estado de descuido imputable a los responsables de custodiar o resguardar los bienes, “sin perjuicio de que pueda establecerse en la investigación la sustracción de los bienes por el propio funcionario o servidor público encargado de la custodia y administración de las vacunas”, refiere la denuncia por presunto peculado.
ELEMENTOS DE CONVICCIÓN
Entre los elementos de convicción que sustentan la denuncia la procuraduría adjuntó las notas informativas en las que el contralor Nelson Shack revela la pérdida de las cuatro dosis de la vacuna de Sinopharm y el siniestro de otra. Además adjunta la relación de los integrantes del comité de vacunación del hospital Hipólito Unanue, conformado por ocho personas, entre ellas Yenny Albarracín Huanca (directora ejecutiva encargada del hospital) y Francisco Chura Pinto (presidente del cuerpo médico), así como los jefes del departamento de enfermería, unidad de epidemiología, departamento de farmacia, unidad de estadística, área funcional de salud ocupacional y responsable de inmunizaciones.