Puno. El último 21 de enero, los regidores de la Municipalidad Provincial de El Collao – Ilave (MPECI), Germán Quispe Jinez y Jaime Ticona Maquera, presentaron ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), la solicitud de vacancia del alcalde Villanueva Maquera Resalaso.
Imputaron la causal de nepotismos, ya que Agustín Mamani Resalazo, quien laboró en la comuna, sería su primo hermano, y la madre de este, Juana Rezalazo Rezalazo, sería la tía carnal.
Adjuntaron a fojas 30 del expediente, la partida de nacimiento N° 210 de Juana Resalazo, la que habría sido tramitada el 10 de enero del 2021 en la Municipalidad de Chucuito – Juli. Dicha copia tiene el sello legalizado del notario de Ilave, Arturo Poma Rodrigo.
En ese momento, el alcalde negó el vínculo, y dijo que la tentativa de vacancia escondía intereses políticos. Además, precisó que el apellido suyo es Resalaso, mientras el de su supuesto familiar es Resalazo.
PARTIDA ‘BAMBA’
Se hizo un seguimiento a los documentos con los que se le imputa el delito, acudiendo a la Municipalidad Provincial de Chucuito-Juli, para rastrear a la ‘tía carnal’, que sería hermana de la madre del alcalde. En el área de Registro Civil no les dieron información, ya que no existirían los datos de Juana Resalazo Resalazo.
Así, el 4 de febrero del 2021 se requirió la presencia del representante del Ministerio Público, Milton Vega Vita, fiscal provincial de Chucuito-Juli. Se hizo una constatación en dicha oficina al registral, cotejando que la partida de nacimiento de la supuesta tía (Juana Resalazo Resalazo), no fue emitida en ese despacho.
NI SELLO NI FIRMA…
El acta fiscal al que accedimos indica que cuando el fiscal pregunta al registrador sobre dicha partida, este refiere que “ni los sellos ni la firma que aparecen en esa acta son suyas; además que al buscar en su base de datos de partidas sistematizadas, no aparece tampoco los datos de esta persona Juana Resalazo Resalazo”.
Luego de dicha diligencia, el registrador civil de Chucuito-Juli, Walberto Arisaca, fue notificado para seguir con la denuncia contra la fe pública en su modalidad de falsificación de documentos, donde la agraviada es la municipalidad y el propio servidor edil.
TRÁMITE VERBAL
El regidor Germán Quispe, dijo que dicha partida la pidió al registrador de manera verbal. «Le pedí nomás, la buscó y a los siete días me lo entregó, está su firma y sello», expresó.
El concejal admitió que no hizo el trámite regular, ni efectuó pagos por ventanilla. «Fue verbal nomás, al registrador más bien».