Cercado. Más de la mitad de las topellantas que delimitan el espacio de ciclovía en la última cuadra de la calle Santa Catalina (Cercado) están deterioradas a menos de dos años de haber sido implementadas por la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA). Inclusive, de algunas solo queda el rastro de una pequeña porción de caucho, producto del impacto con las llantas de los vehículos que diariamente circulan por esa vía.
Precisamente estos delimitadores debían evitar que los choferes invadieran el carril de los conductores de bicicletas. Esto, sin embargo, no ha sucedido, pese a que el flujo de unos 20 mil vehículos que transitaban en hora punta por el Centro Histórico de la ciudad ha disminuido debido a las restricciones sanitarias como la inmovilización social por la pandemia del covid-19.
El gerente del Centro Histórico de Arequipa, Álvaro Zúñiga Alfaro, manifestó que iniciará un proceso de mantenimiento de los topellantas de citada calle y de otras donde también se pusieron estos separadores.
«El problema es que esto tomará unos meses por la burocracia que existe en este tipo de requerimientos», lamentó.
Con respecto a las sanciones específicas a los conductores transgresores del respeto al espacio de las ciclovías, manifestó que ya existen normas de tránsito que los choferes deben respetar por el bien de los ciclistas de la ciudad.