Cercado. Los tres dirigentes del Valle de Tambo (Islay) que lideraron las protestas contra el proyecto minero ‘Tía María’ en 2015 continuarán en la clandestinidad pese a que el Poder Judicial los sentenció ayer a cumplir entre 7 y 13 años de cárcel.
«Es decisión de ellos, pero para mí todavía debemos esperar a la apelación para ver cómo se desenvuelve esto. Son, para mí, líderes y no delincuentes», indicó el abogado Héctor Herrera.
La orden de captura de los dirigentes, según el jurista, se emitió junto al adelanto de sentencia el último 7 de enero. Ese día, el Primer Colegiado Supraprovincial Penal de la Corte Superior de Justicia concluyó que los sentenciados Pepe Julio Gutiérrez Zeballos, Jesús Cornejo Reynoso y Jaime de la Cruz Gallegos incurrieron, indistintamente, en diversos delitos como extorsión, entorpecimiento del funcionamiento de los servicios públicos, disturbios y motín.
El abogado y decenas de manifestantes del Valle de Tambo que protestaron ayer en el frontis del Poder Judicial rechazaron que los jueces no leyeran, en su totalidad, la sentencia condenatoria y decidieran enviarla mediante un correo electrónico.
«No nos permitieron hacer alegatos sobre la autoría no ejecutiva ni mucho menos por los delitos alternativos de que se les acusa», advirtió.