Hasta hace unas semanas, el registro de recojo de cadáveres en domicilios estaba en cero. Sin embargo, ahora las cifras han remontado y ya van diez personas que fallecieron en sus viviendas. De estos, 6 tenían edades entre 20 y 30 años y no presentaban comorbilidades.
En ese sentido, María Elena Flores, directora ejecutiva de la Red de Salud Arequipa-Caylloma, explicó que dicha situación prende las alarmas entre los grupos más jóvenes que aún continúan asistiendo a reuniones sociales sin el mínimo de cuidados para evitar la covid-19.
No obstante, viendo que se veía venir un panorama similar, la funcionaria indicó que para mitigar y atender el ascenso de contagios, la red ahora cuenta con 304 trabajadores que integran cien Equipos de Atención Integral de Salud, que tienen como función atender al mayor número de posibles infectados.
Asimismo, dijo que todos los establecimientos cuentan con ivermectina para que esta sea repartida a los que lo necesitan.