El ciudadano Fernando Vilca Ramos denunció que la muerte de su hijo fue registrada como una baja por COVID-19 a pesar de que no se le practicó una prueba rápida que lo indique.
Es más, según indicó, su hijo pudo morir asesinado, pero la Fiscalía no abrió investigación para esclarecer la muerte.
Según indicó, el día 3 de agosto el cadáver de su hijo de 26 años, de iniciales N.V.V., fue encontrado en un descampado con huellas de violencia. A pesar de ello, registraron la muerte como una causada por la COVID-19, por lo cual pide una investigación.