Una supuesta bomba, que estaba dentro de una cajita de color blanco, causó gran pánico entre los comerciantes del Mercado Central y los mismos transeúntes.
La alerta fue reportada ayer, indicando que una caja sospechosa fue abandonada cerca de una de las puertas principales del referido centros de abastos; exactamente, en la calle Fermín Arbulú.
Un equipo de policías de emergencias se trasladó inmediatamente al mercado. Los efectivos aislaron la zona y cerraron las puertas de acceso al centro de abasto.
Tras varios minutos de examinar la caja, los agentes determinaron que la supuesta bomba, solo era una encomienda abandonada.