Cercado. Médicos y autoridades de Arequipa aprueban la renuncia de Gustavo Rondón, exjefe del Comando Covid-19, porque el equipo no tenía utilidad operativa, puesto que sin autoridad legal eran las autoridades regionales, provinciales y distritales las que determinaban las directrices en la región.
Para Javier Gutiérrez, decano del Colegio Médico de Arequipa, esta decisión era previsible desde hace unas semanas, debido a que las decisiones que comunicaba Rondón no eran apoyadas por el resto de funcionarios, sino todo lo contrario, eran un impedimento y causaban enfrentamientos.
Por su parte, René Flores, presidente de la Federación Médica de Arequipa, indicó que era bien conocido para el gremio que la prioridad de Rondón son sus intereses políticos antes de servir a la población.
Evidencia de ello eran sus viajes realizados a distintas provincias, a fin de promocionarse, en vez de enfrentar los problemas que surgían en la ciudad, como el aforo del transporte, comercio informal, entre otros.
Ambos profesionales coincidieron en que la salida de Rondón no afectaría la situación de la pandemia, porque a la fecha el sistema de salud ha sido fortalecido y tiene capacidad para atender a más pacientes. Lo que sí puede ser un desencadenante de nuevos problemas es la suspensión de los contratos del personal de salud que ingresó a trabajar durante la emergencia, ya que de ocurrir una segunda ola de contagios, el sector Salud tendría una carencia de mano de obra.
OMAR CANDIA
En tanto, el alcalde provincial Omar Candia indicó que sí hubo falta de coordinación con el Comando en algunas de las decisiones tomadas respecto a la reactivación económica, como el aforo del transporte público.
Empero, fueron decisiones que se promulgaron desde el Ejecutivo y que eran a favor de dinamizar la economía.
En ese sentido, Candia señaló que ahora no es prioridad encontrar un reemplazo de Rondón, puesto que a cargo se quedan las autoridades elegidas y como máxima autoridad el gobernador regional, Élmer Cáceres Llica. No obstante, lo que sí es prioridad es que a la par que se vaya reactivando la economía también es indispensable que el sector Salud esté preparado para una segunda ola de contagios de covid-19, la cual se produciría a fin de año a raíz de las fiestas de Navidad, fin de año e inicios del verano.
Por su parte, su compromiso de acá a seis meses es la desinfección y limpieza del transporte público y paraderos, además de la entrega de una planta de oxígeno.