El último 22 de junio de 2020, Sin Fronteras informó que los fiscales Eliot Maximiliano Albarrán Burgos y Manuel Oswaldo Deza Castillo, encubrieron el ‘arranche’ (y devolución) de dinero perpetrado el 17 de noviembre de 2019 por seis policías al mando del mayor PNP Pedro Campos Cusihuamán, en la comunidad de Tambillo, distrito de Pomata.
Niega encubrimiento de policías que «arrancharon» dinero en Tambillo-Pomata pero videos lo contradicen
El oficial de la policía llegó a esa zona al promediar la 1:00 de la madrugada junto al álferez PNP Diego Núñez Isla, y los suboficiales Dushan Alexis Astete Pareja –acudió con el nombre ‘fantasma’ de Luján-, Alexander Lima Mendoza, Natalia Cuno Mamani y Ferdinan Llanque Carbajal. Una sinuosa orden de operaciones preveía la incautación de más de 150 kilos de droga pero la acción terminó en robo de dinero: se llevaron 7 mil y 1500 dólares en efectivo. Después del atraco fugaron.
Los comuneros retuvieron a los suboficiales Natalia Cuno Mamani y Ferdinan Llanque Carbajal, quienes recibieron una golpiza.
Horas después de aquel día, ambos fiscales llegaron a Tambillo supuestamente para liberar a los policías del ‘secuestro’. Los campesinos negaron que exista ello y advirtieron que lo que hubo fue retención por arresto ciudadano porque se registró el robo de dinero a una vivienda. En vez iniciar investigación de oficio, los fiscales les pidieron una denuncia ‘de parte’ del agraviado (a). Después ambos representantes del Ministerio Público, les recomendaron y hasta conminaron a “arreglar”. Esto quedó registrado en videos.
CARTA NOTARIAL
Sin embargo, pese a las evidencias, en fecha 8 de Julio de 2020, el fiscal Eliot Maximiliano Albarrán Burgos, envió una carta notarial amenazante al editor de este medio de comunicación advirtiendo una demanda de un millón de soles.
En su carta, el fiscal negó que haya encubierto el robo de dinero y que, como representantes del Ministerio Público, más bien no se sometieron al chantaje de la comunidad que en todo momento pedían que se les devuelva el dinero hurtado.
Sostuvo más bien que los comuneros mediante violencia y amenaza insistían por el dinero y que “se oculten hechos relacionados con el TID…”.
Asimismo acusa al periodista que redacta la noticia, haber incurrido en ánimo difamador por acentuar que “no detuvieron a los policías pese a estar en flagrancia”.
Albarrán Burgos, precisó que su trabajo en Tambillo consistió en pedir a los comuneros que entreguen a los secuestrados y que presenten su denuncia, previo sustento del dinero que sustrajeron los policías. “¡Tráiganme el documento con que han retirado el dinero!”
Y, nos concede la oportunidad para que probemos haber encubierto a los policías y, que también le probemos que debió abrir investigación. Sostuvo que el fiscal de Juli, Manuel Deza ya había abierto investigación y dejó entrever que no estaba obligado a hacerlo.
ENCUBRIMIENTO
Sin Fronteras, cuenta con videos de la reunión que sostuvieron Albarrán Burgos y Deza Castillo con los comuneros de Tambillo. Las imágenes tiran por los suelos su versión de que no actuó ni levantó acta debido a la turba. En ningún momento se nota agresividad de los comuneros, tal es así que el aludido fiscal conmina a los comuneros con poses histriónicas.
El fiscal dice que acudió a la comunidad para recuperar a los policías retenidos. Pero en realidad llega por convocatoria del mayor Pedro Campos. En las imágenes les dice a los comuneros que si no liberan a los policías él se iba del lugar. “(…) Desde luego los secuestrados me lo entregan. Porque si no me lo entrega también me voy. Porque así funciona. Ese es el sistema. (…) Ahora si usted quiere administrar justicia y usted lo quiere hacer, yo me retiro también no tengo ningún problema. ¡Me voy!”.
Los comuneros insistieron que los policías que intervinieron en Tambillo, fueron a robar dinero, y sin embargo, Albarrán, primero pidió que el agraviado le acredite la procedencia del dinero.
“Acredítenme pue cuando menos. Ósea yo puedo decir, ahorita, por decir, usted me ha robado este 50 mil dólares ¿Y yo lo detengo por eso? No pues ¿no es justo, no? Acredítenme pue cuando menos. Ósea si usted me dice. Por eso le estoy llamando al agraviado. Tráiganme el documento con el que ha retirado el dinero”. Esta expresión es claramente intimidadora.
En otro momento, un comunero tras insistir que las comunidades tenían derecho, Albarrán les retruca con una pregunta. “¿Usted quiere administrar justicia? Entonces nos retiramos. Ósea para que me llaman entonces, pue”.
Empero este no es el único fiscal que conmina al «arreglo», su colega de Chucuito-Juli, Deza Carrillo lo dice sin reparos. “Ahora si ustedes ven una situación de que no hay denuncia de parte. Usted decía, como dice (…) quieren llevar la (…) situación en paz ¡hágalo!”.
Esta posición es acentuada por Albarrán Burgos. “Por eso les estoy dándole la oportunidad si ustedes quieren arreglarlo, arréglenlo ustedes nada más. No hay problema”.
Esto grafica el encubrimiento. ¿Por qué no se actuó de oficio frente a la denuncia pública de robo?
La situación de Albarrán Burgos es más comprometedora, pues asiente el robo y adelanta que procesarían a los malos policías. “Si el mayor está reconociendo, véanlo ustedes. Yo le estoy diciendo; él va tener proceso igual”. Sin embargo, hasta antes que salga a luz estos videos, los fiscales no iniciaron ninguna investigación por robo de dinero contra los policías. Se ofreció impulsar un proceso y nunca cumplió. ¿Qué otra prueba más de encubrimiento?
Aquel día, los comuneros hicieron que el mayor PNP Pedro Campos devuelva el dinero sustraído a la agraviada; esto por recomendación tácita de los fiscales.
Finalmente, podemos reiterar que aquel día en que intervienen los fiscales ¡Sí hubo flagrancia! Porque los policías retenidos fueron aprehendidos cuando fugaban después de un hecho delictuoso dentro de la misma escena del delito.
Es preciso mencionar, que el ‘arranche’ policial fue revelado el 9 y 10 de diciembre de 2019, detallando hechos criminales que debieron ser investigados a rigor por la fiscalía. No se hizo.
Sin Fronteras publicará la saga de videos a los que accedimos para que se conozca más detalles de aquel sinuoso episodio. El señor Eliot Albarrán Burgos, no nos va a intimidar.
Su carta notarial revela su actitud intimidatoria, acaso la misma que aplicó el 31 de enero contra un perro en la ciudad de Desaguadero. Aquel día hizo un disparo al aire en plena calle, al costado de un banco.
Dicho fiscal ha sido policía, y en esa institución no acumuló pergaminos ni actos loables. Su separación será motivo de próximas ediciones